Formar parte de la junta directiva de un FQHC es una oportunidad única para generar un impacto significativo en la salud y el bienestar de su comunidad. Como miembro de la junta, ayudará a guiar el rumbo de una organización con una misión específica: brindar atención médica asequible y accesible a las poblaciones marginadas. Adquirirá una valiosa experiencia de liderazgo, contribuirá a la equidad en salud y colaborará con un equipo diverso de profesionales y voces comunitarias. Es una oportunidad para garantizar que las necesidades reales de la comunidad influyan en la prestación de servicios de salud, a la vez que crece personal y profesionalmente.